Yo: ¿Que pasó?
E: Se mojó mi polo con la sopa... ya no quiero comer!!!
Yo: ¿Y por eso te pones asi? ¡No grites por cositas asi... se ve feo!!!
...
Es cierto, a veces nos agarran en nuestros cinco minutos de locura, ya sea por pendientes de la casa u otras circunstancias de nuestro dia a dia...
Mi hermana pudo presenciar este acto. me dijo: "SI TÚ TE ALTERAS, NO LLEGARAS A SOLUCIONAR SU INCONVENIENTE, RECUERDA QUE ALGUNA VEZ FUISTE NIÑA Y NO TE GUSTABA QUE NO TE COMPRENDAN... CÁLMATE"
Me acerque hacia mi niño, y le dije: "No debes alterarte, si se mojo, no importa, te levantas y vas a cambiarte, no es grave, lo podemos lavar..." Mi bomboncito estuvo más tranquilo, y cada que ocurre la misma situación, se levanta y me mira diciéndome: "Mami, no importa, me puedo cambiar de ropa y luego se lava, verdad"... Situaciones como esta, son las que atravesamos dia a dia con nuestro bomboncito, hay muchas cosas que aun no tolera, pero siempre estamos conversando y poniendo ejemplos, incluso recordándole que en una etapa fue pequeño, que no hacia las cosas correctamente, pero que con mucha paciencia, fue aprendiendo; pero como madre, también me doy cuenta que incluso a mi misma, se me esfuma la paciencia... trato de concentrarme en las consecuencias de una mala reacción, respiro, lo escucho y juntos hacemos ejercicios de respiración... nos esta ayudando...
Y aquí una manera más divertida con molinillos que podemos practicar con nuestros niños:
Ahora, todos los días trabajo con mi Santa Paciencia... Así que manos a la obra...